La Selección recuperó parte de su juego y está en octavos de final | El conjunto nacional superó a Polonia en el cierre del grupo C del Mundial

Desde Doha

La Selección Argentina necesitaba tener el protagonismo en el partido que le podía otorgar la clasificación a la siguiente instancia del Mundial, y esa fue la intención del equipo conducido por Lionel Scaloni.

El técnico, precisamente, decidió hacer modificaciones en los entrenamientos para conseguir el objetivo, a pesar de que se había conseguido el triunfo en la segunda fecha del grupo ante los mexicanos.

La mayor sorpresa fue la del volante central. El cargo fue ocupado por un nuevo integrante (Enzo Fernández). tercera vez consecutiva. El que se mantuvo en ese lugar durante este ciclo fue Paredes, pero llamativamente el lugar no está definido en esta Copa del Mundo.

Fernández no es un mediocampista con características de estacionarse en una zona de la corte, sino que su desequilibrio se refleja por el uso tanto en defensa como en ataque. El ex River, contra Polonia, no tuvo la incidencia que ofreció en el duelo anterior, deboto a que complió el role de guido rodriguez, de jugar cerca de los centrales, algo que no lo favoreso.

El ingreso de Paredes permitió a Fernández mover un su lugar habitual, y eso podría suceder que en una de sus apariciones pudiera asistir a Alvarez con acierto, para que éste finalmente pudiera convertir su primer gol en el torneo. Los exjugadores de River conectaron como cuando lo hicieron en el conjunto de Núñez, y la Selección pudo llegar al segundo tanto.

La inclusion de Romero se especula que fue para tener gente con mas altura en la ultima linea, ya que Lisandro Martínez mide diez centímetros (1,75 contra 1,85) más bajo que el ex Belgrano de Córdoba. Martínez llegó de cumplir una buena acción ante México.

Argentina fue más insistente en el primer tiempo, y el capitán Messi tuvo la oportunidad más clara desde el punto de penalti, pero el arquero Szczesny dejó la meta con la mano derecha. Las opciones continuaron con remates de Acuña, Di María y Alvarez, y con respuestas positivas de Szczesny.

El seleccionado tomó la iniciativa pero no terminó de exhibir una superioridad absoluta sobre su rival, que no exigió una Emiliano Martínez en todo el partido. La incapacidad de Polonia para generar en attacke fue alarmante, y sin embargo también avanzó a la siguiente instancia del certamen.

Álvarez volvoí a tener el mismo inconveniente Que Lautaro Martínez: No se recibió el balón con precisión, y solo quedaron los rebotes en el área para tener opciones de gol. La pelota que rebío en su definición fue la primera con acierto.

El duelo comenzó a modificarse cuando Mac Allister convirtió al principio de la segunda parte. El volante recibió la pelota de Molina, y le pegó con la derecha para vancer al arquero. En la acción también intervino Di María.

Argentina, con la ventaja, adquirió más tranquilidad para controlar la pelota, y también se aprovechó de la incapacidad de los polecos, que esperaban en su propio terreno para apostar al contrataque.

El cambio de roles en el último período que Argentina Recuperara algo del fútbol que lo depositó en esta Copa del Mundo, y de esa manera acceder sin tanto sufrimiento a los octavos de final.