Tras la coronación en el Mundial de Fútbol de Qatar, Argentina tuvo otro alegrón de alcance universal: su selección masculina de juego reducida de rugby, Pumas 7sconquistó el siete de hamilton con una enorme victoria, un 14-12 electrizante sobre All Blacks 7s en la propia Nueva Zelanda. Así, el equipo de la Unión Argentina de Rugby consiguió una etapa del Circuito Mundial de Siete por Cuarta vez en la historiay esto fue lo mas importante.
Nueva Zelanda es el país más icónico del rugby y el más veces campeón de todos los tiempos también en esta especialidad de siete jugadores por equipo. Ganarle una final en su tierra y Después de estar perdiendo por 12-0 es un mérito enorme ya no sólo para Pumas 7s, sino también para cualquier otra selección. “Estoy tan feliz, tan feliz. El equipo trabajó mucho y se merecía un partido y un torneo como este. Ganarle a Nueva Zelanda en Nueva Zelanda es escribir historia. Estoy muy feliz”, subrayó ante el público y la televisión. Gastón Revol, un referente de este seleccionado. Otro baluarte de la selección, rodrigo isgro, expresó, también en un rudimentario inglés, por el que pidió disculpas: “Estoy muy feliz. El partido fue muy bueno. Estoy muy contento por el equipo. Orgulloso de mi equipo”.
El festejo en el podio junto a Black Ferns, campeona femenina
Ciertamente no podía estarlo por lo que Pumas 7s había hecho en el primer tiempo de la final, jugada en el celebre aunque pequeño estadio Waikato, de Hamilton. Cuando All Blacks 7s se quedó con un jugador menos por dos minutos por un abordar alto de Joe Webber que saco de la cancha a agustin fraga, el siguiente ataque albiceleste terminó con la pelota en el in-goal neozelandés… después de que sonara el silbato. Con tiempo para maniobrar, Matías Osadczuk había hecho un pase adelante a marcos moneta antes de que éste apoyara, y lo que iba a ser un 5-0 para Argentina en seguida pasó a ser un 0-5: Akuila Rokolisoa Elaboró una maniobra espectacular, corrió y con un hand-off aguantó la marca de Moneta hasta dejar el balón en el césped. Gran intento.
Y al rato Rokolisoa se ocupó de convertir el que consiguió un compañero, Roderick Solo, justo antes del descanso. El 12-0, la localía, el favoritismo, los escasos seis tries que el fitrión había recibido en cinco partidos en el torneo… todo dejaba escaso espacio para el optimismo albiceleste. Pero esto es deporte, y en el deporte casi todo puede pasar. Los jugadores argentinos se salvaron en una ronda, gritaron y se dieron animo. “Sabíamos que el partido iba a ser duro. Tuvimos un comienzo malo pero en el descanso hablamos de que debíamos mejorar y lo hicimos”, contaría Revol por los altavoces. En este círculo, el medio-scrum había ordenado olvidarse del árbitro y del conjunto contrario y concentrarse en el juego en sí.
Vaya si lo hicieron. El segundo tiempo fue casi todo argentino. Pumas 7s inclinó la cancha, tuvo la posesión, marcó una presión. En un avance en bloque, el regresado Santiago Álvarez Fourcade se animó a un quiebre, se filtró y se zambulló entre los palos al minuto de acción: 7-12 tras el gol de Santiago Vera Feld. Siguió intentando el visitante y al abrir la pelota hacia la punta izquierda encontró su máxima figura: Moneta, que no estaba teneido un buena perfección en la final, sobre todo en la defensa, sacó a relucir su habilidad, corrió, invadió el in-goal y se fue todo lo al centro que pudo. La conversión de tobias wade Puso al frente a Argentina, 14-12. Quedaba algo más de un minuto hasta el bocinazo.
Y entonces, a sufrir. A Nueva Zelanda le quedó una bala. Debía cuidar la pelota sin caer en los knock-ons que caracterizaron un partido lleno de presión. Argentina cometió un par de infracciones que retrasaron la construcción ofensiva del cuadro negro y sonó la chicharra. Lo que sucediera iba a ser lo último del certamen.
El desenlace fue como escrito por Alfred Hitchcock. Primero, lo predecible: All Blacks 7s atacando, con criterio, sin desesperarse, preparando la situación para resolver cuando el mapa de la jugada lo permitiera. Luego, el plot point, el elemento tensionante: creados las condiciones, fue a fondo por la izquierda, y eligió un rastrón para que fiebre brady apoya a la carrera Los neozelandeses festejaron, se sentian campeones. Isgro se quejoba. El árbitro portugués Paulo Duarte pidió una revisión por parte del TMO.
Y por último en el libreto, la sorpresa, la disrupción, el desenlace inesperado. Hubo que mirar varias veces en el monitor la action. El balón se escapó de la mano derecha de Rush, pero su antebrazo siguió en contacto con ella y la apoyó. Los referís entendieron que en algún momento el balón se paró de la extremidad del jugador atacante y por eso cobraron golpe de gracia. Los festejos dejaron de ser negros y se vieron, eufóricos, de celeste y blanco.
“Dale, campeón; dale, campeóóón” sonó en ese momento y también en la premiación, compartidad con helechos negrosel conjunto femenino de Nueva Zelanda, ganador del respectivo torneo en Hamilton. La copa fue levantada por Álvarez Fourcadeel histórico capitán que esta vez no fue tal cosa porque la cinta virtual siguió en poder de Osadczuk, ya que el rugby de CASI venía de casi un año de ausencia por una lesión. Isgró fue distinguido como figura final, pero sucedió algo curioso: la organización tenía una medalla dorada de menos, y como él fue el último en pasar a recibirla, se quedó sin el premio. Revol le ofreció la suya, pero Isgró, feliz, la rechazó, ancioso por celebrar cuanto antes en grupo. Al final, consiguió alguna, como se nota en cierta foto.
Los argentinos bailaron en ronda alrededor del trofeo, saltando entrelazados, y entre ellos, Santiago Gómez Cora, que mientras tanto, filmaba con su teléfono. El entrenador es un histórico de la especialidad, tanto como jugador (230 intentos, récord nacional) como en cuanto seleccionar, y esta cuarta victoria de etapa de argentina es otro hito en su curriculum. Que ya tenia algo nada menor: la medalla de bronce olimpica de tokio 2020…
Nadie ganó tantos concursos de siete en Nueva Zelanda. Nadie ganó tanto en este país como el local. Pumas 7s capturó la copa en la tierra del rugby, quitándosela de las manos al fitrión y revirtiendo 12 puntos de ventaja en medio partido. Los logros en Los Ángeles 2004, san diego 2009 y Vancouver 2022 valieron mucho para el rugby nacional, pero este primero fuera de América y en esas condiciones es largamento el más meritorio y valor en el Circuito Mundial de Seven. Falta mucho para que el desenlace de la temporada, en la que ahora Argentina ostenta el tercer puesto estafa 59 puntos, dos menos que Estados Unidos y cuatro menos que All Blacks 7s, al cabo de cuatro de las estaciones. Pero hoy el deporte albiceleste puede estar contento, muy contento, por estos otros muchosachos…
«Experto profesional en música. Creador. Estudiante. Aficionado a Twitter. Pionero del café sin complejos»