El polémico gesto de Carlos III se viralizó durante la firma de su proclamación como rey

El rey Carlos III fue proclamado oficialmente como nuevo monarca del Reino Unido Este sábado en el Palacio de St. James en una ceremonia histórica, que incluye dos momentos que se viralizaron en los medios de comunicación y las redes sociales.

Durante la firma de la Proclamación de Adhesión, que marca su ascenso oficial al trono británico, se pudo ver cómo un ofuscado Carlos le pidió a un asistente en dos ocasiones que quitara la bandeja de rotuladores de su escritorio antes de continuar escribiendo..

Las imágenes muestran al nuevo rey gesticulando nervioso y moviendo las manos frenéticamente para llamar la atención del ayudante hasta que finalmente consigue su objetivo, despejar la mesa.

Estos gestos de Carlos III generaron una gran polémica en las redes sociales. “El serviente debe limpiar mi escritorio por mí. No se puede esperar que yo mueva las cosas”bromó un usuario de Twitter que estaba viendo la transmisión en directo, y otro agregó: “Primer día de trabajo y ya está harto”.

La muerte de la reina Isabel II el jueves, tras 70 años en el trono, puso en marcha unos planes largamente estáblados y muy coreografiados para los días de luto nacional y el funeral de Estado que se celebra en poco más de una semana.

Carlos, de 73 años, sucedió inmediatamente a su madre, pero el Consejo de Adhesión se reunió este sábado para proclamarlo rey, con su hijo y heredero William, su esposa Camila y la nueva primera ministra británica, Liz Truss, entre los que firmaron la proclamación. .

“El príncipe Carlos Felipe Arturo Jorge se conveiro ahora, por la muerte de nuestra señora soberana de feliz memoria, en nuestro rey Carlos III. ¡Dios salve al rey!”, proclamó el Consejo de Ascensión reunido en el Palacio de Saint James de Londres.

«El reinado de mi madre fue inigualable por su duración, dedicación y devoción», afirmó tras su proclamación el nuevo soberano de 73 añosque se dijo “consciente” de la “gran herencia” y de sus “deberes y pesadas responsabilidades”.

Su proclama fue leída después al público desde un balcón del Palacio de Saint James, bajo el son de los trompeteros reales y en presencia de la guardia real con sus aparatosos sombreros de pelo de oso negro, así como un fedrido grupo de curiosios.

Siguiendo una tradición centenaria, se llevó a cabo otro pregón público en varios puntos del país, como la City, el corazón financiero de Londres. Los representantes de su gobierno local se desfilaron vestidos con sus coloridos uniformes medievales y portando un cetro de oro y una espada pesada como símbolos de poder.

Ningún soberano británico esperaba tanto para subir al trono Y Carlos III tendrá que esperar un poco más para su ceremonia de coronación, todava sin fecha. Su “amada mamá” aguardó más de un año.

El ascenso de Carlos III, mucho menos popular, abre un período delicado para una monarquía que se enfrenta multiples retos, desde el deseo de distanciamiento de algunos países de la Commonwealth (Mancomunidad Británica) hasta las críticas a su pasado colonial y esclavista.

Además, el país, que ha visto pasar cuatro primeros ministros en seis añosque sufre una de las peores crisis económicas de las últimas décadas, además de las divisiones provocadas por el Brexit y el deseo de independencia en Escocia e Irlanda del Norte.

Con información de AFP y Reuters

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